La vida puede ser algo hermosa y de una buena vez entender que no todo es color de rosa en ella, es decir que no es fácil; muchas veces pensamos que personas de buen corazón, que no tienen malicia, que no se meten en problemas con nada ni nadie, y tampoco hacemos maldades, sin embargo la vida me lo ha demostrado todo, por más bueno que seas, no creas que se te tratará igual.
Existen cosas que muchas veces lo seres humanos de buen corazón piensan que los seres que le rodean tendrán la misma amabilidad de ellos pero para nada es así. Quizás por nuestra inocencia creemos que el mundo es como lo pintamos en nuestra mente o que hay más cosas de las cuales no nos percatamos que las demás personas tienen. Las buenas personas son la que siempre dan sin esperar nada a cambio y eso nadie lo ve.
Es cierto que las personajes de buen corazón no insultan, no golpean, no lastiman, no abusan de menores, ni matan, ni roban, ni asaltan, la vida solo les dice "no creas que por que no hagas nada de eso te vamos a tratar bien", "si eres vegetariano, no creas que un animal no te va a atacar". Las personas con esa personalidad le suelen hablar muy fuertes, quizás se enojan al regañarles ya que ellos como no hacen eso creen que no se lo merecen, y bueno la cosa es como lo que escribí al principio del párrafo.
Hay algo de lo cual uno se da cuenta, es que por mas que creamos que encontremos personas amables nos aparecerán hasta peores. Muchas veces se llegan a la conclusión de que, ¿Si ese individuo es tan buena persona por que la vida le ha dado tan duro haciéndolo pasar por esa trágica experiencia?.
Hay veces que las personas de fuerte carácter le cogen con gente así y de la peor manera, en caso de muchas mujeres cuando están embarazadas, sin ellos darse cuenta debido a su leve ingenuidad e inocencia de que a las mujeres en esa situación son así.
Tenemos que tener bien claro que la vida es "injusta" y que la justicia es "ciega", aunque esto último no sería el caso pero como es la justicia de mi país pues así lo involucramos. Recordemos que no nos debemos dejar aplastar por groserías de otros, seguir adelante y sonreír es lo que importa. La felicidad solo depende de uno mismo no de nadie más.
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