La Navidad además de ser una época para compartir, es también momentos donde nos invade por mucho la nostalgia. Desde pequeños siempre compartimos en familia y más cuando nos dejaban los regalos en el árbol de navidad que luego lo destapábamos y de inmediato jugábamos con ello.
Luego de pasar tanto tiempo se vuelve costumbre cuando hacemos la cena de navidad en familia y que con el tiempo las cosas cambian, nuevas sillas se suman y luego las sillas que estaban quedan sin ocuparse. Esos casos se deben cuando en un sentido la familia va creciendo cuando unos de los miembros traen su pareja, y en el otro caso por oportunidades de mejoría de vida se van del hogar y ese espacio queda desocupado.
También uno de los casos es que se nos van miembros de nuestras familia, en mi caso esta fue la primera Navidad sin mi abuela; es decir que hay personas que parten físicamente de este mundo pero ellos quedan presentes en nuestros corazones. Quienes estamos alejados de nuestra familia sentimos mucha añoranza cuando no estamos la lado de nuestros padres y hermanos lo cual provoca un poco de tristeza y nostalgia.
Todos los años la navidad va cambiando todo sea por circunstancias de la vida o por causas naturales, pero los cambios que pasan cada año no es culpa del ser humano, sino por que es ley de la vida.
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